En una rara y emocionante exhibición celestial, las auroras boreales, típicamente reservadas para latitudes más al norte, han sido avistadas en España. Específicamente en Asturias se pudo presenciar este espectáculo natural en la madrugada del viernes 10 al sábado 11 de mayo. Este fenómeno ha sorprendido a la comunidad científica y a los aficionados a la astronomía por igual.
¿Qué son exactamente las auroras boreales? Estas son luces brillantes y coloridas que adornan los cielos del hemisferio norte, generadas por la interacción entre partículas cargadas del viento solar y el campo magnético de la Tierra. Cuando estas partículas chocan con los gases atmosféricos, especialmente oxígeno y nitrógeno, liberan energía en forma de luz, creando un espectáculo visual impresionante.
Las auroras boreales suelen ser avistadas en regiones cercanas a los polos magnéticos de la Tierra, como Alaska, Canadá, Islandia y el norte de Europa. Sin embargo, en ocasiones excepcionales, las condiciones pueden ser propicias para que estas luces del norte se desplacen más al sur, permitiendo avistamientos en latitudes más bajas, como en España.
El evento del 10 al 11 de mayo en Asturias ha sido uno de los avistamientos más notables en la historia reciente de España. Este fenómeno, que probablemente sea el mayor desde 1938, cuando se divisaron auroras boreales de intensidad en plena guerra civil española, la noche del 25 y la madrugada del 26 de enero, ha generado gran interés y emoción en la región.
¿Por qué Asturias fue testigo de este extraordinario espectáculo? Es el resultado de una tormenta solar especialmente intensa, combinada con condiciones atmosféricas favorables y una actividad geomagnética inusualmente alta.