Durante el pasado viernes y sábado, Asturias experimentó un fenómeno invernal notable con nevadas que dejaron acumulados considerables en altitudes superiores a los 1000 metros. En muchos puntos, se registraron más de 50 centímetros de espesor, generando un paisaje blanco que destacó en las cotas elevadas de la región.
Las precipitaciones de nieve fueron resultado de la presencia de una masa de aire frío y húmedo sobre la región. La baja temperatura facilitó la acumulación de nieve, especialmente en las zonas más elevadas como Picos de Europa y Somiedo. En Picos de Europa la acumulación de nieve alcanzó cifras notables, superando en algunos puntos los 60 centímetros. Este fenómeno ha transformado temporalmente el paisaje, cubriendo los picos y bosques con un manto blanco a lo largo y ancho de la Cordillera Cantárica
Las autoridades respondieron de manera efectiva para garantizar la seguridad y movilidad de la población. Equipos de limpieza de carreteras y maquinaria especializada fueron desplegados para despejar las vías afectadas, minimizando así las posibles complicaciones derivadas de la nevada.
Además de las consideraciones logísticas y de seguridad, la nieve ha atraído a entusiastas de los deportes invernales. Amantes del esquí y actividades al aire libre han aprovechado la ocasión para disfrutar de un entorno invernal único en la región durante éste domingo, con la primera apertura de las estaciones de esquí de Valgrande-Pajares y de la leonesa San Isidro.